Si vivís en Argentina, lo más probable es que tengas algún conocido psicólogo. Ya que somos el país con más psicólogos per cápita cada 100 mil habitantes.
Existen muchos mitos y desconocimiento alrededor de las prácticas en psicología. Esto se debe a que en nuestro país, se encuentra muy difundida la práctica psicoanalítica, a pesar de haber sido desterrada en la mayoría de los países del mundo debido a no presentar la correspondiente validez científica.
La realidad es que los psicólogos no interpretamos sueños ni podemos leer mentes ni adivinar o reconstruir el pasado de nuestros consultantes. La psicología es una ciencia que estudia la psique y el comportamiento humano y nuestra labor como psicólogos es brindar herramientas para modificar comportamientos o poder impulsar un mayor bienestar en la persona.
En nuestro país, como dijimos, hay una diversidad de marcos teóricos en donde, sin embargo, hay una predominancia del psicoanálisis, por lo que es probable que asociemos esa corriente con la psicología en sí. Sin embargo, hay otras corrientes teóricas que se practican en el mundo y que hace varias décadas han llegado para quedarse.
Terapia Cognitivo - Conductual (TCC), ¿qué es y para qué sirve?
La TCC se distingue principalmente del psicoanálisis y de otras corrientes por ser una terapia que se encuentra enmarcada dentro de lo que se conoce como prácticas basadas en evidencia (PBE) o psicología científica. Esto quiere decir que son tratamientos que han sido puestos a prueba e investigados sistemáticamente y que han sido validados empíricamente por haber demostrado su eficacia en poblaciones amplias y con problemáticas diversas. La misma surge alrededor de la década de los 80’ teniendo como pionero a Aaron Beck, quien introdujo por primera vez un manual de terapia cognitivo - conductual para trastornos depresivos. Hoy en día, la TCC cuenta con estudios y ha sido validada para una amplia gama de problemáticas.
La TCC se basa fundamentalmente en el supuesto de la interrelación entre nuestros pensamientos, conductas y emociones. Es decir, que nuestros pensamientos afectan nuestras conductas, por lo que un cambio de pensamiento puede llevar a modificar la emoción provocada y la conducta misma. Dicho en otras palabras, generalmente sufrimos por los pensamientos que asociamos a cierto suceso que por el propio suceso en sí. Y generalmente, no podremos modificar esos sucesos, pero sí podremos modificar los pensamientos, emociones y conductas asociados al mismo.
Más allá de la teoría subyacente lo más importante, es que la idea y objetivo de la terapia es ayudar al paciente a poder monitorear estos pensamientos para tener más noción de los mismos, así como poder modificar los que resulten desadaptativos o perjudiciales para su vida e intereses particulares. Todo esto, acordándolo con el paciente y proponiendo metas alcanzables, revisando los avances y brindando herramientas útiles y concretas.
¿Qué esperar de las primeras sesiones con un/a psicólogo/a?
Es indispensable que dentro de las primeras sesiones el psicólogo:
- Escuche detenidamente a la persona para poder comenzar a armar hipótesis sobre lo que le sucede
- Explique cómo trabajarán de allí en adelante y brinde toda la información necesaria al consultante.
- Comente cual es el tratamiento que posea mayor evidencia científica para el problema a resolver, informar sobre sus pros y contras, así como brindar distintas alternativas que hayan demostrado eficacia.
Es importante, además, que el psicólogo le otorgue un consentimiento informado al consultante en donde este pueda expresar su voluntad de iniciar el tratamiento y que pueda contestar todas sus dudas.
La idea central es que el paciente tenga un rol activo en sus cambios, por lo que se evaluarán objetivos en conjunto, así como las herramientas para conseguirlos de acuerdo a las características de la persona. Un psicólogo cognitivo - conductual no te va a decir que hacer, ni tiene una solución mágica, pero sí te acompañará a conseguir esos objetivos, trabajando habilidades y explicando los modelos subyacentes a tus conductas para poder entender mejor tus comportamientos.
La terapia es un proceso y es sumamente importante que uno como paciente pueda tener un rol activo y tomar decisiones, y en especial, que se le brinde el tratamiento con mayor evidencia mayor eficacia haya demostrado para el problema a tratar.
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