Justicia en Argentina: un caso criminal que demuestra una vez mas la ineficiencia del sistema
“Hecha la ley hecha la trampa” dice un refrán. Al parecer eso fue lo que aquí aplicó. La crónica cuenta lo siguiente: una mujer que se embaraza, tiene a su hijo, lo nombra Lucio, la familia por parte del novio sabe que esa chica es complicada y andaba en asuntos ‘extraños’ y ‘no convincentes’, la pareja termina y ella se pone de novia con una chica.
Hasta aquí nada raro. El problema viene cuando comienzan a haber denuncias de maltrato hacia uno de los miembros… el menor: Lucio, su hijo. Distintas son las versiones: por un lado se cuenta que la pareja de ella le gritaba mucho, por otro lado la misma madre le daba “chirlos para hacerlo escarmentar”. ¿Cómo fue entonces que este niño terminó… torturado, violado y asesinado? Fueron encontradas culpables tanto la madre en complicidad con la pareja.
Las informaciones son variadas, y la familia por parte del padre del menor apunta a que comportamientos y situaciones no convincentes estaban sucediendo y que el mismo Lucio manifestaba actitudes que hacían saltar alarmas (como dibujos grotescos reflejando esas escenas, llantos, deseos de quedarse con otros familiares, entre otros) pero que nadie prestaba atención. Ya es tarde, pues Lucio ya murió, de hecho… En este ultimo mes nuevas pistas salieron a luz por parte los familiares de ambas familias: “que ella no estaba siempre en sus cabales”, “era problemática”, “quería siempre la tenencia legal”, “era media loca”, “no puedo creer lo que hizo”. Sin mencionar los famosos chats de whatsapp que empiezan a formar parte de las pistas. A tal punto de que Maximiliano Valenti, hermano de la madre (Magdalena), afirmó que ella ya dejó de ser su familia. En varios momentos, según parece ser, su abuelo paterno (Ramon) habría insistido por tenerlo bajo su cuidado… Pero sin resultado.
Como agravantes de la situación para el juicio que se lleva a cabo hay dos factores:
- El que exista política y tangiblemente hablando el MINISTERIO DE LA MUJER, GENERO Y DIVERSIDAD el cual brinda un apoyo a estas chicas acusadas, a pesar de que las pruebas jurídicas apuntan en otra dirección (es decir, hay una politización al respecto).
- El hecho de que la madre de Lucio necesitaba tenerlo para cobrar un plan social.
Dos preguntas surgen: ¿por qué los hijos siguen siendo un botín de guerra? ¿qué tan politizada está la Justicia en casos donde hay “feminismo” presente? (porque incluso el padre de la jueza que le negó la tenencia de Lucio a su papá… increpó a este masculino y a su abuelo inclusive). No hay que perder el foco que aquí la víctima es un menor de edad sin consentimiento sino que se hallaba “bajo el rigor de la Ley”, pero… ¿Con qué Justicia?
Junto con el crimen de Fernando Baez Sosa, el caso de Lucio Dupuy espera también la condena de quienes le arrebataron la vida… Con una ansiada prisión perpetua.
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