VOTO JOVEN, VOTO ÚTIL: ¿Qué papel tienen los jóvenes en el nuevo escenario electoral?
Durante los últimos años, los principales partidos y candidatos políticos que compitieron en las urnas, mostraron una clara inclinación hacia un público objetivo mucho más específico que en otras décadas. Además, incorporaron herramientas y plataformas de propaganda política digitales, lo que se condice con el nuevo público. Esto se debe a tres motivos: los cambios demográficos estructurales en Argentina, la nueva ley electoral de voto joven y elecciones P.A.S.O; y la masividad de las Redes Sociales. Pero, ¿Qué papel tienen los jóvenes en el nuevo escenario electoral?
El sistema electoral argentino parece cada vez más complejo y difícil de entender, pero si de algo estamos seguros, es que el voto joven es definitorio para la próxima elección. El resultado que puede arrojar la juventud es independiente de la variedad de sistemas de listas, fechas, y turno de las elecciones en los distintos niveles de gobierno. Entendamos un poco mejor de qué estamos hablando.
Los cambios en la estructura demográfica
Según los últimos datos del Censo 2022 y del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos, la población total de Argentina es de aproximadamente de 45.808.747 personas, pero solo 34.332.992 se encuentran en condiciones de votar, es decir casi el 75%.
Buenos Aires junto con Córdoba, Santa Fe y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires representan los 4 distritos con mayor porcentaje de electores en todo el país, alcanzando más de un 60% entre todos, lo cual deja claro la concentración electoral en estas provincias.
Ahora bien, si nos centramos en la población joven capaz de emitir sufragio, el conglomerado de adolescentes, jóvenes y adultos de entre 16 y 35 años se calcula en casi 13 millones de personas, por lo cual el padrón joven representa al 30% del total de la población y al 40% del padrón electoral.
Se trata de un número más que significativo para tomar como público específico al cual apuntar las campañas electorales, y el cual cuenta con generaciones con una brecha representativa muy diferencial respecto de los adultos y adultos mayores, con preocupaciones, deseos y realidades muy particulares.
Los cambios en la ley electoral: voto opcional desde los 16 y elecciones P.A.S.O.
Votar es ejercer el derecho político a elegir las autoridades que van a representarte ocupando los distintos cargos públicos del país. Es universal, porque es un derecho que le corresponde a todos los argentinos mayores de 16 años independientemente de su raza, sexo, creencias o condición social. Es igual porque el valor que tiene tu voto es el mismo para todos los ciudadanos. Es secreto, para que nadie pueda influir en tu voto. Y es obligatorio, porque votar no es solo un derecho, es un deber.
La reforma en el año 2012 de la Ley de Ciudadanía (Ley 26.774) amplió el derecho al voto en elecciones a los jóvenes de entre 16 y 17 años de nuestro país convirtiéndolos en sujetos protagonistas del ejercicio democrático (antes, solo votaban mayores de 18 años). Si bien la normativa en nuestro país establece que el voto es obligatorio, la Ley no establece sanciones para los/as menores de 18 años que decidan no hacerlo, pero sí para aquellos mayores de 18 años. A su vez, los mayores de 70 años tampoco están obligados a concurrir a las mesas, ni sancionados si no lo hacen.
Los nuevos electores jóvenes (personas de 16 y 17 años), constituyen un total de 795.561 personas y representan el 2,32% del padrón a nivel nacional, lo que significa que pueden influir en los resultados de una elección y constituyen una nueva masa con necesidad de ser representada. Por otro lado, la participación electoral varía no solo por rango etario, sino por turno electoral: En las elecciones presidenciales del año 2019, la participación en las PASO estuvo en un 76.40%, en tanto que en las generales el porcentaje superó el 80% del padrón. Esta tendencia en donde en las elecciones generales hay mayor concurrencia a las urnas que en las PASO se repite desde que se implementaron por primera vez las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias.
El otro cambio que se introdujo fueron las elecciones primarias, también llamadas PASO (Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias) que fueron creadas en el 2009, tras la aprobación de la Ley Nº 26.571.2. En ellas se definen básicamente dos cuestiones: qué partidos están habilitados a presentarse a las elecciones nacionales (que según la ley son aquellos que obtengan al menos el 1,5 % de los votos válidamente emitidos) y también quedará definida la lista definitiva que representará a cada partido político en las elecciones generales, de ahí lo de interna abierta.
La diferencia entre las P.A.S.O. (13 de agosto) y la elección general (22 de octubre) respecto a cómo se vota se encuentra en que mientras en la elección general hay solo una única boleta para cada agrupación, en la P.A.S.O. cada agrupación política puede presentar tantas listas para competir por el mismo cargo como desee. (Ej. Bullrich o Larreta en Cambiemos; o Massa o Grabois en Unidos por la Patria, cada dupla compite para presidente por el mismo partido, pero solo uno por cada partido seguirá en carrera a las elecciones generales).
Una particularidad muy importante de estas elecciones es que muchos distritos decidieron desdoblar las elecciones para votar autoridades locales y provinciales en fechas distintas a la votación de autoridades nacionales. Además, puede suceder que haya agrupaciones políticas que presenten una sola lista para un cargo o varias listas para competir en una “interna”. Aquellos partidos que presenten una sola lista, será la definitiva que pasa directamente a las elecciones de octubre si supera el 1,5% de los votos. (por ejemplo: Javier Milei con “Libertad Avanza” y Juan Schiaretti con “Hacemos por nuestro país”).
La campaña digital
Ahora bien, las redes sociales en política facilitan llegar de un modo más directo a los electores, mejoran la comunicación con ellos, pero además de permitir dirigirles un mensaje más personalizado, se suma la interacción, ya que no es solo un medio de difusión, sino que permite la respuesta de los usuarios. Es por esto, que el esfuerzo de las grandes figuras del oficialismo y la oposición por empatizar con la cultura joven responde a un simple dato: más de 13 millones de personas jóvenes se informan y se preparan para votar a través de las redes sociales, ya que no suelen recurrir a los medios tradicionales de comunicación y se encuentran en permanente contacto con medios digitales (sin tener en cuenta que casi todo el electorado -joven y no joven- hoy en día tiene redes sociales, o por lo menos WhatsApp).
Según un relevamiento de Taquión, en las últimas semanas se mencionó más de 850.000 veces el término “spot” en Twitter solamente, llegando a más de 6 millones de visualizaciones entre los spots de Bullrich, Milei y Larreta juntos {relevamiento hasta el 11 de julio}, mientras que aquellos spots que generan más interacción derivando en volumen de conversación fueron los de Massa y Bullrich superando las 50.000 menciones. Los primeros spots oficiales tuvieron un alto impacto en la conversación digital y si bien el foco principal de la política Argentina encuentra mayor participación en Twitter, también tiene difusión por Instagram, Facebook y WhatsApp, entre otros.
Sin embargo, la red social que despertó el interés de los Jefes de Campaña para captar al público joven, es sin dudas Tik Tok (con más de 16 millones de usuarios en Argentina): esta plataforma incluye contenidos que van más allá de la propaganda e implican la participación de los candidatos en trends y conversaciones más personales, que incluso rozan lo bizarro, pero que captan la atención juvenil con un algoritmo mucho más específico y cautivante.
La nueva dinámica de tik tok deja de lado la gráfica para lograr la atracción de la audiencia a través de contenido audiovisual, con videos interactivos que pueden incluir: desde el spot de campaña, un ping pong de preguntas y respuestas o un trend con una canción o baile de moda. Y es por eso, que los candidatos deben aggiornarse y mostrar un perfil más humano y hasta “actoral”capaz de generar la viralización.
Voto jóven, voto útil
A modo de conclusión y con todas estas características expuestas, debe tenerse en cuenta que el voto joven y el voto útil son dos variables distintas, pero que pueden volverse dependientes.
Por voto útil (o estratégico) se entiende a una “modalidad de decidir el voto ciudadano en función del eventual resultado de las elecciones. El voto útil concede máxima importancia a ganar la elección, a la vez que busca evitar la dispersión del voto en múltiples alternativas. Requiere un análisis de las posibilidades de cada candidato y de sus probabilidades reales en una elección. Habitualmente esta estrategia tiende a polarizar una elección”.
Por ejemplo, en estas elecciones presidenciales de 2023, si combinamos las P.A.S.O. con el voto útil, un elector más bien liberal que en una elección definitiva votaría a Javier Milei (Libertad Avanza), en las P.A.S.O. Probablemente no vote a Milei porque su partido no presenta internas, por lo cual llegaría a las elecciones generales de octubre de forma directa si obtiene como mínimo 1,5% de los votos, sin competir con otro candidato de su partido (en cierto punto tendría una llegada asegurada). Por esta razón, en las PASO se inclinaría por su candidato más afín dentro del Frente de Cambiemos (que sí tiene interna), eligiendo entre Patricia Bullrich u Horacio R. Larreta. Y haría esto para que en las elecciones generales de octubre, sus opciones más afines se encuentren con posibilidades de ganar. Y así poder tener opciones en las que se encuentre mejor representado por cada partido en las elecciones generales.
Pero ¿por qué voto joven?
La ampliación del electorado con el voto opcional desde los 16 años, junto con el crecimiento poblacional joven, generaron un público mayoritario de personas entre 16 y 35 años, que precisamente utilizan las distintas plataformas digitales como medio de información (Fingurú es uno de ellos). La facilidad de llegada de las campañas electorales por estas vías ejercen una mayor influencia en los jóvenes que los medios de comunicación tradicionales (radio, tv, gráfico, etc.).
Pero otra particularidad del electorado joven, es que este segmento etario tiende a identificarse más con movimientos liberales y empezó a acercarse a la derecha, a diferencia de lo que venía sucediendo en las décadas anteriores. Es por esto que quienes buscan fidelizar estos nuevos seguidores (derecha) o recuperar las adherencias perdidas (izquierda) deben recurrir a las nuevas plataformas que mejor y más amplia llegada tienen en los jóvenes. Y las características de Cambiemos y Libertad Avanza de cara a las P.A.S.O; hace pensar que buscarán un voto eficiente y estratégico.
Más electorado significa más votos; y por ende, más posibilidades de ganar.
Resta esperar para ver quién contrató al mejor Community Manager…
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