La calidad debe ser un punto clave en el desarrollo de los resultados de las empresas si estas buscan maximizar sus ganancias. Para lograrlo, muchas optan por implementar un sistema de gestión de calidad bajo los estándares de la Norma ISO 9001.
Pero, vayamos por partes…
¿Qué es un sistema de gestión de calidad y por qué debería considerar implementarlo en mi empresa?
Un sistema de gestión de calidad es un conjunto ordenado de normas y procedimientos que regulan el funcionamiento de todos los procesos de una empresa para garantizar la eficacia y eficiencia de sus operaciones. Cuando mencionamos sistema de calidad nos referimos a que toda la organización debe estar alineada con los métodos y términos dispuestos por la dirección relacionados a la calidad. Muchas personas confunden tener un área de calidad con un sistema de calidad. Lo ideal es que el área de calidad asuma la responsabilidad de hacer llegar los métodos necesarios para que todas las demás áreas tomen la responsabilidad de auto gestionarse siguiendo los lineamientos de calidad asumidos por la dirección. La dirección debe ser la primera parte comprometida para que la calidad sea aplicable a todas las áreas de la misma. De lo contrario, el sistema de calidad no podrá hacerse efectivo.
Con la disposición de este sistema la organización obtendrá un control estandarizado de cada una de sus operaciones, pudiendo evidenciar las fallas o desvíos de una forma precisa, para luego corregirlos de una manera efectiva. Entre los desvíos más recurrentes en los que una empresa puede incurrir frente a sus clientes podemos encontrar: demoras en los tiempos de entrega, roturas de empaques, deficiencia en los productos, etc. También podremos detectar anomalías que tienden a generar costos improductivos imprevistos por no cumplir con los procesos definidos. A su vez, la implicación de un correcto funcionamiento de los procesos generará un mayor desempeño por parte del personal al verse trabajando en un ambiente organizado y controlado.
¿Qué es una norma ISO?
La sigla ISO hace referencia a “International organization for standardization” (organización internacional de estandarización). Es una organización independiente que desarrolla y pública normas internacionales para diversas áreas de actividad, como la tecnología, la seguridad de los alimentos, la gestión ambiental, y la gestión de calidad. La función de estas normas es proporcionar requisitos, especificaciones, directrices o características para garantizar la calidad, la seguridad y la eficiencia en los procesos y productos. Las normas ISO se utilizan en todo el mundo para establecer mejores prácticas y mejorar la calidad, la eficiencia y la seguridad en los productos y servicios que las empresas ofrecen.
ISO 9001
La ISO 9001 es una norma de calidad que establece los requisitos que una empresa debe considerar cumplir para implementar un sistema de gestión de calidad con éxito. Se podría decir que es una guía para organizarse eficazmente. La misma incluye directrices claras para establecer la planificación, el control de los procesos, la mejora continua y la satisfacción de los clientes. Para obtener la certificación, una organización debe demostrar que cumple con todos los requisitos establecidos en la norma; los cuales incluyen establecer una política de calidad, identificar los procesos y recursos necesarios, documentar la información, establecer objetivos y metas, medir el desempeño del personal, y tomar acciones para mejorar constantemente el sistema de gestión de calidad.
¿Por qué es importante la certificación?
La implementación y posterior certificación de esta norma dejará evidencia de que la empresa tiene incorporado un sistema de gestión de calidad. La certificación nos brinda la garantía de que la organización cumple con los estándares de calidad a nivel internacional, y hace que la misma sea percibida con mayor confianza frente a potenciales clientes.
Conclusión
Podemos concluir que la implementación y certificación de un sistema de gestión de calidad traerá beneficios en todos los aspectos posibles. Tanto para obtener un control interno de los procesos como para garantizar la satisfacción de los clientes, y de este modo ser una empresa reconocida y sobresaliente frente a nuestros competidores.
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